Cuando nos hicimos presente en el campo de La Cruz el pasado 1º de mayo cerca de las 08:00 Hs., teníamos la expectativa de que algo iba a mejorar en lo organizativo con respecto al año pasado, pero pasaban los minutos y no llegaban las autoridades, ello ocurrió aproximadamente a las 09:30 Hs., se ubicaron y comenzaron a llamar a los pilotos para que confirmaran la presencia y frecuencia, mientras por otro lado se comenzó con el tema de las bases, con gran sorpresa veíamos que la organización no contaba con los elementos necesarios, señores de la FAA dichos elementos son utilizados por otras categorías y que casualmente son las más numerosas del nacional ¿Es mucho pedir que la FAA disponga de bases y cintas de 15 metros marcadas cada metro en cantidad suficiente? O por lo menos haber hecho las gestiones con tiempo solicitándolas a algún club que las posea. A todo esto recién bien pasadas las 11:00 Hs. Se dio inicio a la competencia. Se comunicó que se iban a realizar 5 rondas con dos grupos, uno de 13 y otro de 12 participantes, al finalizar la primer ronda nos llevamos otra sorpresa, de la forma que se habían formado los grupos competiríamos hasta el final, es decir el grupo que volaba era cronometrado por el otro y así hasta terminar, cabe acotar que en la parte final del punto 3 inciso a) del reglamento dice “…Un diferente punto de largada debe ser utilizado en cada ronda.- En cada ronda debe cambiarse la composición de los grupos, a fin de lograr distintas combinaciones de competidores”. Otras falencias a destacar fue la falta de una línea de seguridad (Punto 3 inciso s)), no se controlaron los modelos, el inicio y final del tiempo de trabajo no se comunicó de forma correcta, etc.
Los que estamos acostumbrados a participar en el Campeonato Cordobés o la Copa Norte no podemos evitar hacer comparaciones y en ellas la FAA pierde lejos, cuando debería ser al revés. En un torneo nacional se recauda mucho dinero, sabemos que los gastos son considerables, que la FAA tiene deudas y que debe quedar un monto para solventar otras actividades, pero no descuidemos a los que hacen el aporte, se ha escuchado decir a algunos que no participaran mas en un nacional y de otros sabemos que ya no lo hacen. Tengamos presente que el objetivo de estos eventos es incentivar la participación, no es mucho el dinero necesario para una correcta organización.
Separo de todo esto a las personas que estuvieron en la mesa de control de este nacional de motoveleros, tengo entendido que fueron designados a último momento, le pusieron el pecho y resolvieron todas las situaciones lo mejor posible, pero esto no alcanza, es necesario conocer la categoría.
Como comentario final nos quedó claro que aquella expectativa que teníamos al comienzo de la mañana se fue diluyendo y el balance de este nacional con respecto a los anteriores resultó negativo.
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